Como asimila un boxeador los golpes
que recibe arrinconado contra las cuerdas,
cada gancho, cada puño,
cada derechazo a la mandíbula,
cada caída en que se corta un pómulo,
cada caída en la que cuenta diez
y luego se levanta de la lona
con la nariz sangrante
y se pone su faja en la cintura
y alza su brazo victorioso,
peso completo,
así puedo decir
que me olvidé de ti.