De corazón las tripas
se enroscan
y anidan en el centro,
remolino de lenguas
que ya nada alimentan
desde que la madrugada
me muerde los labios
y mi vientre
me habla con otra boca
porque ha adquirido la identidad
de un muerto de hambre.
Me encantoooó. Muy bien escrito!!!
ResponderEliminarBesos